Una reflexión sobre el libro El estado Emprendedor de Mariana Mazzucato.
Desde que el hombre tiene conciencia de sí mismo, ha intentado por todos los medios sobrevivir y después ha puesto atención en su comodidad. Si bien la innovación es un concepto nuevo que aparece con Joseph Schumpeter, economista y ex ministro de finanzas en Austria, entre otras cosas, introduce el concepto de la novedad otorgada por esa fuerza inmaterial y/o material que irrumpe en los mercados. Lo cierto es que la innovación ha sido un proceso milenario que acelero su tranco a medidos del siglo XX con la invención del computador y posteriormente con mayor fuerza a principios de nuestro siglo; la comunicación entre computadoras sin ser mediadas por el ser humano a principios este siglo podría ser el inicio de un cambio de era que no ocurría desde la invención de la imprenta en el S.XV.
El estado emprendedor, de Mariana Mazzucato, es un libro desafiante con una perspectiva de la innovación y su aporte desde el mundo público, contrarrestarlo con el privado. Su autora, en 271 páginas más 100 páginas de referencias, bibliografías, notas y aclaraciones, decide enfrentar las grandes innovaciones del último tiempo, personalizando en Mac como icono y ejemplo de una de las innovaciones más disruptivas de nuestra época, donde nadie le da el peso ni el valor del estado emprendedor ni visionario de la innovación.
La autora se desliza por el libro con una visión inclinada hacia el estado, como agente sostenedor de la innovación, ya sea por sus políticas y fondos como por sus concursos y por las múltiples investigaciones y proyectos aplicados que fueron pagados por el estado y derivaron en herramientas utilizadas por la empresa privada. Ella no se detiene solo en analizar el origen de los fondos de innovación, en Estados Unidos, además reclama el rol del estado como autor y dueño de muchas innovaciones. Son los contribuyentes que financian al estado y son estos recursos los que financian avances tecnológicos que derivan en patentes, que generan dividendos para privados.
Este es un libro inteligente, de una economista muy influyente en nuevas generaciones, Chile no está lejos de su influencia ideológica, la cual es abrazada en la administración del presidente Gabriel Boric. La realidad es un tanto distinta en mi opinión, los recursos otorgados por nuestro país a la investigación están lejos de los recursos que ella cita. Además, su visión materialista de la innovación, la cual atribuye al recurso económico como financiamiento el centro del resultado, sin duda que es importante, pero es discutible, al menos centrarse solo en eso. La participación estatal de la innovación debe ser protagónica, pero si el estado fomenta esta inversión con fines de autoría podría derivar en un sistema comunista capitalista, el cual está lejos de promover la creatividad humana y de lo que la gran mayoría de los Chilenos queremos.
La fuerte crítica que realiza a las patentes como medio de medición de progreso de un país, es interesante analizar. Mazzucato, nos presenta esta oposición entre el estado y los privados, para algunos los pone en la vieja oposición, Para otros, Mazzucatto viene a revolucionar la mirada de la innovación. Lo cierto está, que esta historia, o bien como la vemos, es nueva, un solo siglo. Pues la rueda, el arado, la máquina a vapor y otras tantas nos pueden hablar también de sus efectos en nuestra cultura. La innovación siempre estuvo y hoy se viste de pantalones largos para profesionalizarse, y abarcar todos los espacios de nuestra vida, la política también. En menos de cien años cambiado todo y en menos de 10 hemos olvidado que la última vez que cambio una era el hombre recién llegaba a América.
Mariana Mazzucato nos trae una reflexión aguda e inteligente. Su reflexión es un insight para LATAM. Un gran libro, no confundirlo con una Biblia.
Léalo.
Nicolás Fontaine
17 de abril de 2023
Faro de La Nueva Extremadura